1. Qué ver y hacer en Tanzania – Programa de safari de 15 días
2. Otros destinos que visitar en Tanzania
3. Guía de viaje para Safaris en Tanzania
Tanzania es la esencia de África. Un viaje por Tanzania es un viaje a la tierra primigenia, tal y como era cuando apareció el Ser Humano en nuestro planeta. Visitar los parques nacionales de Tanzania es uno de los mejores viajes que podemos hacer en nuestra vida. Parques Nacionales como Serengeti o el cráter de Ngorongoro conservan aún grandes concentraciones de fauna salvaje, pero están amenazados, cada vez más, por la presencia humana. Hace unos años se propuso construir una autopista por el medio del Serengeti, afortunadamente se rechazó el proyecto…
Además del gran atractivo de ver animales en su hábitat natural, Tanzania nos ofrece unos paisajes de escandalo; desde las inmensas praderas en la sabana africana, hasta cordilleras de volcanes, lagos alcalinos que forman parte de la gran falla del Rift Valley o archipiélagos con islas tropicales y playas de agua turquesa. Tanzania es, para mi, uno de los piases más bonitos del mundo.
Y, además de fauna y paisajes, en Tanzania encontramos la cultura masai, una etnia de origen nilótico que antiguamente eran guerreros, pero que hoy en día se dedican a pastar sus vacas y cabras y hacer artesanía para vender a los viajeros. También podremos ver la cultura swahili, que vendría a ser una mezcla entre árabes y africanos. Esta cultura se puede ver, sobre todo en la costa de Tanzania y Zanzibar.
Un programa de 15 días por Tanzania y Zanzibar es lo más recomendable. Es un viaje que resulta caro ya que un safari supone contratar muchos servicios (vehículo 4x4, guía, tasas de los parques nacionales, alojamiento en pensión completa, etc.), pero os aseguro que una ruta de safari por Tanzania la vais a conservar en vuestra memoria y lo vais a guardar en vuestra carpeta de “momentos felices” para toda la vida.
En este artículo os explicamos nuestra experiencia basada en múltiples viajes realizados a Tanzania y os damos información útil y recomendaciones de viaje a modo de guía para vuestro viaje por Tanzania.
Si viajas desde España a Tanzania, la mejor opción de entrada es el aeropuerto internacional Kilimanjaro (JRO) a 40 km de Arusha. Esta población es la capital de los safaris por los parques nacionales del norte de Tanzania.
No hay vuelos directos desde España a Arusha, así que tendrás que hacer una escala en un punto intermedio, que variará según con que compañía vueles (Amsterdam con KLM, Doha con Qatar Airways)
Con KLM el vuelo es diurno y se llega sobre las 21:00 a Arusha. Necesitarás un traslado a la ciudad y hacer una noche de hotel. Con Qatar Airways es un vuelo nocturno y se suele llegar a media mañana del día siguiente de la salida. Ese día, normalmente ya no se llega a ningún parque nacional, pero va bien para tomárselo con calma, llegar al hotel de Arusha y descansar un poco del vuelo transcontinental.
Una alternativa, que no siempre sale más económica y además requiere una logística engorrosa es volar a Nairobi en Kenia. Si vuelas a Nairobi, tendrás que tomar un vuelo interno Nairobi-Arusha o un shuttle bus que hace la ruta por carretera (5 horas con paso de frontera) Nairobi-Arusha.
Hay otras opciones como entrar por Dar Es Salam y tomar un vuelo doméstico a Arusha. Es cuestión de comparar opciones y ver cual te conviene más por comodidad o precio.
Este es uno de los parques nacionales más pequeños de Tanzania, pero es interesante porque es como un compendio de los diferentes ecosistemas que se encuentran en Tanzania. Aquí hay, de forma reducida; llanuras, volcanes, selva, alta montaña, lagos y ríos.
El Parque Nacional de Arusha está a las afueras de la ciudad de Arusha. No es un parque nacional “obligatorio” dentro de un programa de viaje ideal por Tanzania, de hecho, si se ha de recortar por algún lado por tema presupuesto o tiempo, este sería uno de los sacrificados. Sin embargo, si puedes visitarlo, te sorprenderá por su belleza. Además, es el único parque donde se pueden hacer safaris a pie y en barca por el lago.
Recomendamos visitar este parque al principio del programa de safari. Resulta una introducción perfecta, pero no un final de fiesta espectacular, como podría ser el cráter Ngorongoro o Tarangire.
El Parque Nacional de Arusha tiene mucha fauna; jirafas, búfalos, ñues, cebras, gacelas, leopardos, hipopótamos, pero lo que más abundan son las aves. Se han registrado hasta 400 especies diferentes, entre ellos, los flamencos rosados, que a menudo se ven en grandes manadas por los lagos de Momela. Es un paraíso para los amantes del Birdwatching.
El otro gran atractivo del Parque Nacional de Arusha es la ascensión al Monte Meru, el segundo pico más alto de Tanzania con 4.566 m (el primero es el Kilimanjaro con 5.892 m). Aquí vienen a escalarlo muchos aficionados al alpinismo. El Monte Meru es un buen entrenamiento para hacer posteriormente el ascenso al Kilimanjaro, la montaña más alta de África.
Este es uno de los 4 principales parques nacionales del norte de Tanzania, es decir; Lago Manyara, Tarangire, Cráter de Ngorongoro y Serengeti. Todos estos parques tienen una fisonomía muy diferente entre ellos, que aporta variedad a un programa de safari.
El Lago Manyara es uno de los lagos alcalinos, de aguas sulfurosas, que forman parte del Rift Valley, la falla que está dividiendo el continente africano. Aquí se pueden apreciar claramente los escarpados de esta falla.
Paisajísticamente es precioso, sobre todo cuando hay manadas de flamencos en el lago. Este parque nacional alberga varios ecosistemas muy diferenciados; desde el propio lago y sus zonas pantanosas hasta bosque selvático y sabana arbolada.
Durante un safari por el Parque Nacional del Lago Manyara podrás ver grandes manadas de babuinos, jirafas, elefantes, ñues, cebras, antílopes varios, muchos tipos de aves y, lo que todo el mundo busca, leones trepadores de árboles.
El Lago Manyara suele ser el primer parque que se visita cuando estás viajando por Tanzania. Es una forma de que el programa vaya “in crescendo”.
En los alrededores del Lago Manyara se empiezan a ver gente masai e incluso algún mercado local. Nosotros paramos en uno de estos mercados, que solo venden artículos para los locales, nada de productos turísticos. Nos gustó ver a estas gentes, con sus vestimentas habituales y sus quehaceres diarios.
En los bordes de la carretera también se ven puestos de “souvenirs”, estos si que están orientados a los turistas. Son como tenderetes, algunos muy grandes, que venden todo tipo de tallas africanas, mascaras, mantos masai, artesanías (industriales), etc. Nosotros no paramos en ningún sitio de estos hasta el regreso.
La carretera que te lleva al mítico Parque Nacional de Serengeti pasa por el mismo borde del cráter de Ngorongoro. De esta manera, tienes un primer contacto con esta maravilla de la Naturaleza. Aprovechando esta circunstancia, hicimos un pequeño paseo, llámalo “safari a pie” por el borde del cráter de Ngorongoro con un ranger armado. Por aquí te puede aparecer cualquier animal, incluso depredadores, así que es recomendable llevar un tipo que sepa gestionar un encuentro con una bestia salvaje.... En uno de los viajes a Tanzania se nos apareció una leona por esta carretera, cuando nos dirigíamos al Ngorongoro Sopa Lodge.
El paseo es de una hora aprox. y es emocionante por el hecho de estar en una tierra salvaje, pero también espectacular en los puntos donde puedes ver el interior de la caldera de Ngorogoro. Las vistas son de escándalo. Conviene llevar unos buenos prismáticos para poder ver los animales en el interior del cráter. Esta es una de las imagenes más increibles cuando estás viajando por Tanzania.
También es curioso ver a los masai pastando con sus rebaños por aquí. Se les permite llevar a cabo su actividad ramadera por el Área de Conservación de Ngorongoro porque son sus tierras ancestrales y donde han vivido toda la vida. No dejo de pensar las movidas que tendrán con los depredadores y sus cabras…
La visita a un poblado masai es otra de las actividades que hay que hacer en todo viaje de 15 días por Tanzania. Los masai son una etnia de origen nilótico, es decir, que descendieron de la cuenca del río Nilo hace ya miles de años. Los masai son una etnia mítica, conocida por su fiereza y por ser muy guerreros. Actualmente, los masai son un pueblo de pastores aunque muchos se han reconvertido en guías de safari o trabajan en los alojamientos de los parques nacionales.
La visita a un poblado masai merece la pena. Es un intercambio cultural muy enriquecedor. Si haceis un viaje a Tanzania con niños les impactará mucho. Verán como viven los masai en sus manyattas y se darán cuenta de que muchos niños como ellos viven de formas mucho más primitivas y sencillas que ellos. Será una buena lección de vida!
Seguidamente nos pusimos en marcha hacia el Parque Nacional de Serengeti. Viniendo desde Arusha se entra por la puerta de Naabi Hill. Desde aquí hasta Seronera, en el centro del parque se tarda una hora escasa.
El Parque Nacional del Serengeti es “EL” parque por excelencia de Tanzania y yo diría también de África.
No hay mejor lugar para hacer un safari fotográfico que en el Serengeti. Tan solo has de ver donde se filman los grandes reportajes de fauna salvaje africana, en Serengeti y Masai Mara (es el mismo parque, pero en la parte de Kenia)
Visitar el Parque Nacional del Serengeti debería ser el argumento principal de todo viaje a Tanzania. El Parque Nacional del Serengeti es un espacio inmenso de 15.000 km2 (como media Cataluña) donde habitan las mayores concentraciones de animales de nuestro planeta.
El Parque se divide en sectores (Sur, Centro, Oeste y Norte). Es importante cuando se planea un safari por el Parque Nacional Serengeti, ver donde se sitúan los rebaños migratorios. Aquí, en el Serengeti tiene lugar anualmente la Gran Migración y por eso, el Serengeti es el parque donde se tiene que mirar mejor la época y la zona que explorar. Ver la Gran Migración es uno de los motivos por los que mucha gente quiere visitar Tanzania y Kenia.
De todas maneras, sabed que los animales migratorios son básicamente ñues, cebras y algunos antílopes. El resto de la fauna no hace la migración, es decir, son animales residentes y entre ellos están los grandes mamíferos que todo el mundo quiere ver; leones, leopardos, elefantes, jirafas, búfalos, hipopótamos, guepardos, etc. Aquí, las posibilidades de ver los “5 Grandes” es mayor que en otros parques africanos, aunque en los últimos años la población de rinocerontes ha disminuido alarmantemente… Así que, si no podeis ver los grandes rebaños migratorios no os preocupéis porque veréis animales a tope…
El Serengeti es el mejor parque del mundo para hacer un safari fotográfico, no solo por la abundancia de fauna, también por sus paisajes. Aquí podréis ver los grandes espacios africanos, la sabana africana que necesita el guepardo para correr y cazar a sus presas. Realmente es impresionante contemplar estos espacios en los que puedes ver en un mismo plano varias tormentas diferentes o las puestas de sol más espectaculares del planeta, con el horizonte totalmente abierto.
No hay nada igual al Serengeti, es, en definitiva, un sueño para los amantes de los animales y la Naturaleza virgen. Visitar el Serengeti es uno de los grandes argumentos para viajar a Tanzania
No hay signo de intervención humana en el Serengeti, tan solo los lodges y tented lodges. Antiguamente vivían por aquí los masai, pero en la década de los 50, cuando declararon el Parque Nacional, les hicieron trasladarse al Área de Conservación de Ngorongoro, donde si les permiten vivir.
Para explorar el Serengeti podrías estar una semana sin repetir ninguna zona, pero como no siempre es posible alargar los viajes, os recomendamos como mínimo 2 días (3 si puede ser) para tener una buena idea de lo que supone este parque tan especial.
Cuando sales del Parque Nacional del Serengeti y vas en dirección al Cráter de Ngorongoro, tienes la posibilidad de desviarte un poco y visitar las Gargantas de Olduvai. En realidad se puede visitar un mirador de la zona y un pequeño y desaliñado museo con restos fósiles y huesos de animales.
Aquí, en las Gargantas de Olduvai, se han encontrado restos de homínidos de millones de años. Es un sitio muy importante para los paleontólogos, los hallazgos que hicieron la familia Leakey son de gran valor científico.
Desde el mirador se puede ver una formación rocosa con la marca de los estratos que define cada etapa geológica. El estudio de estos estratos ha ayudado a la datación de los restos humanos.
En el pequeño museo se guardan algunos de estos restos, aunque los más importantes y relevantes están en museos más importantes fuera de Tanzania, a mejor recaudo. Lo que si se pueden ver en este museo, son huesos enormes, de elefantes y otras especies, así como paneles informativos sobre la historia de las Gargantas de Olduvai.
Esta visita aporta variedad al viaje de safari por Tanzania.
Continuando el camino hacia el cráter de Ngorongoro, se puede ver la cordillera volcánica a la que pertenece este volcán, así como otros de menor tamaño, pero igualmente bellos, como son Olmoti o Empakai.
El cráter de Ngorongoro es considerado una de las Maravillas naturales de nuestro planeta. Se trata de la caldera volcánica mejor conservada del mundo, es decir, una caldera totalmente redonda y perfectamente definida.
Se dice que Ngorongoro era más alto que el Kilimanjaro. La caldera de Ngorongoro tiene 20 km de diámetro. Este volcán colapso y se vino abajo debido a los movimientos sísmicos y la actividad volcánica que hubo hace millones de años por aquí.
Hoy en día el Ngorongoro es un volcán apagado, que forma parte de una cordillera donde hay más volcanes, alguno de ellos todavía vivo, como Oldonyo Lengai, sagrado para los masai.
El interior del cráter de Ngorongoro está lleno de fauna salvaje. Las fértiles tierras y pastizales llenas de minerales hacen que crezca una hierba ideal para los animales. Este es el gran secreto de todos los parques nacionales del norte de Tanzania, pero aquí dentro, esto se hace más patente.
El interior del cráter de Ngorongoro es un jardín del Edén. Aquí podréis ver todo tipo de especies animales, entre ellos, los 5 Grandes; elefantes, leones, rinocerontes, búfalos y leopardos. Pero también todo tipo de antílopes, hienas, hipopótamos, facoceros, avestruces, cebras, ñues, etc. Todos, menos jirafas ya que los senderos para descender al interior del cráter son muy empinados.
Junto al Serengeti, Ngorongoro es de “obligada” visita cuando se piensa en viajar a Tanzania. Un safari por el Crater de Ngorongoro es una de las experiencias más bonitas que se pueden hacer en África.
Al ser un espacio reducido, se puede recorrer todo el interior en una jornada de safari, así que no es necesario permanecer más de un día en el cráter de Ngrongoro, a no ser que quieras hacer algún trek a los otros volcanes de la zona.
El Lago Eyasi, de aguas sulfurosas, forma parte del Gran Rift Valley. Su interés principal es que allí habitan varias etnias, los datoga y hadzabe, que se supone son la etnia original o por lo menos la más antigua de la región. Estaban aquí antes que los masai…
Estas etnias viven, aún hoy en día, de forma muy primitiva, son cazadores y recolectores. Y utilizan una lengua de “click” para comunicarse.
Hace unos años se puso en marcha un proyecto de eco-turismo en esta zona, para que estas etnias pudieran “aprovecharse” un poco y beneficiarse de alguna manera del paso de los turistas por esta zona.
El proyecto consiste en acoger a viajeros y compartir con ellos durante unas horas para enseñarles su forma de vida. La actividad estrella son las salidas de caza con los bosquimanos. Los bosquimanos cazan pequeños animales (palomas, ratones, pequeños antílopes, monos) con arco y flecha para comer. Si cazan algo, lo despiezan, lo asan y se lo dan de comer a los turistas.
También les muestran sus cabañas, les explican cosas sobre su cultura, bailan e interactúan con sus niños. El proyecto permite a estas gentes ganarse mejor la vida y subirse al carro de la modernidad. El Lago Eyasi no es interesante a nivel de avistamiento de fauna, pero aporta variedad a un programa de safari. Una extensión al Lago Eyasi en Tanzania es una experiencia cultural muy interesante.
El Parque Nacional de Tarangire completa el programa de los 4 parques principales del norte de Tanzania.
Este parque no forma parte del ecosistema de Serengeti-Ngorongoro-Masai Mara, así que presenta alguna diferencia en cuanto a flora y fauna respecto a estos 3 espacios.
Tarangire es un parque espectacular en cuanto a paisaje, aquí podréis ver praderas de baobabs, el árbol sagrado africano, que parece plantado al revés. Podréis ver ejemplares inmensos con formas fantásticas. Estad atentos porque en las ramas de los baobabs es donde suelen descansar los leopardos.
Tarangire tiene ritmos migratorios opuestos a Serengeti, así, en temporada seca, cuando la región es un secarral, el río Tarangire, la principal fuente de vida de la región, tiene fuentes de agua permanentes y se pueden ver en torno a ellas grandes concentraciones de animales.
Tarangire es, también, el hábitat de la mayor colonia de elefantes del norte de Tanzania. Aquí se pueden ver grandes familias de elefantes pastando entre la hierba o bebiendo en el río, durante casi todo el año. En temporada húmeda, cuando hay agua por toda la región, los animales se distribuyen por un mayor espacio y cuesta más verlos.
A pesar de que Tarangire es un parque enorme, con una jornada de safari ya es suficiente para hacerte una buena idea de lo que es este parque.
Para completar el programa de viaje por Tanzania, una vez finalizado el safari, recomendamos hacer una jornada de trekking por el Parque Nacional del Kilimanjaro.
Ojo, durante esta jornada de trek, no se verá la silueta del Kilimanjaro. La excursión transcurre por las faldas del monte, pero no hay perspectiva para ver la cumbre.
Si hay posibilidad de ver la silueta del Kilimanjaro cuando se viaja por carretera a Moshi, Marangu o al aeropuerto internacional Arusha-Kilimanjaro. Pero debemos avisar de que la mayor parte del año, las nubes cubren la cima del Kilimanjaro, así que las posibilidades de verlo son escasas. Durante la temporada seca (de junio a octubre) hay más posibilidades ya que hay menos nubes en el cielo.
La excursión de 1 día por las faldas del Kilimanjaro es la primera jornada del trekking a la cima del Kilimanjaro. Se trata de una jornada de unas 5 ó 6 horas de caminata hasta Mandara Camp (2.740 m).
La excursión transcurre por una zona de denso bosque tropical, con una vegetación impresionante y especies de flora autóctonas, donde se pueden ver algunos monos.
Esta jornada de trek es interesante para tener una aproximación al Kilimanjaro y para estirar las piernas después de unos días de mucho coche buscando animales. Sienta de maravilla respirar aire puro de alta montaña.
Tras la visita del Parque Nacional del Kilimanjaro, nos trasladaron al aeropuerto internacional de Arusha-Kilimanjaro, donde tomamos un vuelo doméstico con destino Zanzibar. Viajar a Zanzibar es una gran combinación tras unos días de safari por los parques nacionales.
Hay otro aeropuerto secundario, solo para vuelos domésticos, que está justo a las afueras de la ciudad de Arusha. Se llama como la ciudad, aeropuerto de Arusha (ARK). Desde aquí se vuela también a Zanzibar, por eso es conveniente tener claro desde que aeropuerto opera vuestro vuelo.
El vuelo desde Arusha a Zanzibar dura una horita escasa y es directo. Durante el despegue, tendréis otra oportunidad, si está despejado, para intentar ver la silueta del Kilimanjaro. Sería una despedida de la parte continental tanzana perfecta.
Stone Town es el barrio antiguo de la capital de Zanzibar. Este barrio está declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Se trata de proteger un barrio que fue muy importante en la Edad Media, cuando por aquí pasaba la ruta de las Especias y el comercio de los esclavos. Y realmente, parece que se haga un viaje en el tiempo cuando paseas por las callejuelas de Stone Town, llenas de pequeñas mezquitas, palacetes, mercadillos, recovecos, etc. Y la gente, ataviada con sus túnicas y sus sombreritos.
Zanzibar es la cuna de la cultura swahili. Aquí se mezcló lo árabe con lo africano y nació una cultura con identidad propia. Visualmente, lo más representativo son las mujeres de tez negra tapadas con sus coloridos velos, ya que procesan la religión musulmana. La cultura swahili se extiende por toda la costa indica africana, desde Mozambique a Somalia.
La población de Tanzania es principalmente musulmana, aunque en la parte continental, en la zona de los safaris, apenas se ven muestras de ello. En la costa y en Zanzibar si se ve más claramente que son musulmanes, por la forma de vestir, las ciudades, los mercados y las mezquitas.
Stone Town merece una visita de un día entero y es un destino "obligado" cuando se viaja a Zanzibar. Es un destino culturalmente interesantísimo, con muchas cosas para ver.
Después de un día cultural en Stone Town, llega el momento de trasladarse a la zona de playa escogida y descansar un par de días en el paraíso. Zanzibar es una isla con unas playas preciosas y un mar con un colorido espectacular. Es, también, un destino fantástico para los aficionados al submarinismo. El fondo marino de Zanzibar es uno de los más ricos de nuestro planeta y se pueden ver especies como el tiburón ballena, delfines, etc.
La extensión de playa a Zanzibar es la guinda del pastel para este impresionante viaje a Tanzania. Conozco pocos destinos que tengan una combinación tan buena como esta; safari + playas paradisíacas y algo de cultura.
Zanzibar es un archipiélago formado por varias islas; Pemba y Unguja, la más grande, también conocida como “Zanzibar”.
La mayoría de la gente que hace una extensión de playa lo hace a Unguja “Zanzibar” ya que esta tiene muchas playas y hoteles de todo tipo.
Una de las principales características de Zanzibar son sus mareas. El mar se retira durante el día, en algunas zonas más que en otras, y por la tarde vuelve, hasta comerse toda la playa, en algunas zonas.
Muchos hoteles disponen de palafitos con una pasarela para poder bañarse cuando la marea está alta y se ha comido la playa.
La zona donde se nota menos las mareas, es decir, el mar se retira menos, es en la costa norte, en Nungwi y Kendwa. Allí, a penas se retira unos metros.
Zanzibar es una isla muy tropical y tercermundista. Las carreteras están llenas de vida, con niños y animales, así que se ha de ir con mucho cuidado si conducís.
En Zanzibar se pueden hacer muchas excursiones, si sois inquietos y con un día de playa tenéis suficiente, podréis hacer varias actividades interesantes para no aburriros cuando estais viajando por Zanzibar.
Si os gusta tumbaros a la bartola, tomar el sol como lagartos y daros baños en aguas turquesas, podeis hacerlo en todo el litoral que da al Índico. La otra vertiente de la isla, la que da al continente, no tiene a penas playas, es todo manglar.
El vuelo de regreso a casa sale del mismo aeropuerto de Zanzibar. Hay compañías aéreas con las que solo tendrás que hacer una escala de regreso, por ejemplo, KLM en Amsterdam o Qatar Airways en Doha. Estas son las mejores compañías para organizar un viaje a Tanzania combinado con Zanzibar.
Hay otras opciones haciendo escala en Dar Es Salam o Nairobi, con Emirates o Ethiopian Airlines, pero rara vez son más económicas que las mencionadas.